fundado en la tormenta

Presentimiento

El pensamiento artístico es un sentimiento político cuando sabe hacia dónde va, y el sentimiento político es un pensamiento artístico si no olvida de dónde viene,

aún cuando la idea sea una tierra labrada con viejos pensamientos y se nos agriete la sangre por falta de sentimientos,

guardamos en el bolsillo la semilla heredada donde se encuentra escrito que el pensar sentido será siempre un arte político. Nos sienta difícil sin embargo pensar algo tan sencillo.

Tenemos el presentimiento de que los principios y las letras, la Feria, en fin las tintas en paz, existen bajo declaración por escrito que ésta isla es La Patria de los Niños.

Los jóvenes postpensativos y los poetas presentimentales (realizo esta distinción porque los jóvenes tienen bajo determinación del pensamiento histórico la obligación de ser poetas, en tanto los poetas el sentimiento eterno de pensarse jóvenes), pierden en ocasiones su tiempo de azúcar concentrados en la ropa, los peinados, el humo y los teléfonos celulares, Como si los niños se alimentaran de telas y de plásticos cuando sus dientes implacables se clavan como pétalos en el ocaso del día, no es lo mismo que discutir con los amigos cómo es posible el sol a la hora del crepúsculo nos deje a solas en la penumbra con las flores.

Y lo hacen a pesar de saber que los tiempos requieren dedicar la sangre a torcer la dirección del viento y la intensidad de la lluvia, con motivo de las sequías ideológicas actuales. Las mismas demandan sin distracciones, del pensar y del sentir hacia qué atardecer pondremos nuestro sol, el más rojo del mundo.

Nuestra obligación como hombres y mujeres de piel tirante es recuperar los peces que habitan en la vida. Es leer las correlaciones e identificar las contradicciones multicolores que seducen nuestras letras y nuestras tintas, nuestra patria única en cuya bandera llevamos escrito que ésta, es La Patria de los Niños. Por mal que les pese a los lobos o bien que nos aliviane

las semillas viven sin filosofía hoy aquí y ahora alejados de las calles sin azúcar, allí donde le café es amargo como el hambre. Por los pensamientos artísticos que sentimientan los pensares. Por el pensamiento político que sentimienta el arte. Por el arte sentimental que politíca los pensares. Por el presentimiento de que la inteligencia es el arte de pensar con los sentimientos. Como sea y traducido: el político arte de pensar con los sentimientos será el agua que nos salve de la grieta en estos tiempos, el bálsamo de la tierra y de la flor donde los niños clavarán sus dientes, sus pétalos urgentes en el crepúsculo del día. El pan de la idea.