viernes, 14 de marzo de 2014



¿Qué más se puede esperar que un hermano cuando llueve?
escribo mientras tanto bajo el agua un periódico de buenas noticias
en tanto nos recuperamos juntos de esta ausencia momentánea
cuyo punto final es la tierra y su balanza

bajo la piel, país adentro, tengo escondido un pueblo de niños
hijos de un padre absuelto por la historia
por haber criado a los hijos de todos en un país con tan poco
redimido además de cargas en el futuro

pues comprendió la urgencia del pasado
con sus deudas hipotecando las semillas
La revolución finalmente algo tan simple como la felicidad de los niños
¿No es acaso este el mejor destino?

¿Por qué en un país tan rico construimos el eterno destino
de sembrar flores sangradas en la calle del barro
con las manos pegadas a los bolsillos de la ternura
en esta noche de lluvia donde individualmente cada cual cuida a su niño?

abrí los ojos hermano la lluvia pronto pasará
se trata de las nuevas noticias párate mira aquí en el mapa de la mano
se han quedado prendido algunos de estos hijos del futuro contenido
y nos golpean la puerta  con el puño del padre
cuyo plan de amor político continúa salvando niños
nunca es tarde si se espera a un hermano una flor un hijo.

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